Me alegro de veros con vida, chicos. Por desgracia, hemos perdido al resto de la escuela... Es una tragedia. Incluso el templo ha sido destruido.
Más vale que huyáis.
¿Huir? ¿Por qué, maestro?
Hemos logrado acabar con todos los demonios ...
Pero dudo que Piccolo Daimao también haya caído con ellos.
Crees bien, carcamal
¡Has dado en el clavo!